planteamiento historia

Sofá despertó en la mañana con un ligero dolor de espalda, dada la mala posición mientras dormía, por un mal sueño que tuvo que tuvo, que ya se había borrado de su mente. Abrió la cortina y el resplandor del sol de la mañana lleno su habitación, y el rocío se podía ver a través de la ventana. Suspiro que bonito día. Un sábado.
Bajo las escaleras y su abuela le tenia ya preparadas unas galletas de mantequilla con chispas de chocolate. Sus favoritas.
Se le vio una ancha sonrisa y rápidamente se abalanzo hacia las galletas -yummy- digo con el bocado en la boca y la abuela conforma con eso se retiro a seguir haciendo galletas que vendería hoy en Coatepec. -¿Que soñaste?- le pregunto su abuelita, -soné con un jardín nuevo lleno de flores hermosas e increíbles, pero que derrpente aparecía una criatura mitad hombre mitad oso, era espantosa me quería comer definitivamente, y la única forma que yo tenía de vencerlo era con una espada azulada que estaba incrustada en el tronco de un árbol y me era imposible sacarla-. -¿Y que pasaba?- pregunto curiosa la abuela, -no se derrepente todo se hinchaba en flamas que ardieron con todo el lugar y desperte-. -Que horrible sueño esas cosas no son buenas para tener una mañana saludable mi Sofi, dime que cenaste antes de dormir, pues algo te debió haber caído muy pesado...- -nada abuelita no te preocupes bueno iré a bañarme que quede con Jona y Valetina para ir a explorar un lugar nuevo que dice Jona que vio ayer con su hermano-. -Esta bien sofi solo no te vayas a meter en problemas como sueles hacer ok mi corazón?- -Si abuelita, no te preocupes, te quiero gracias por las galletas ¡adiós!-.

Salio disparada de su casa ,en su bicicleta roja que adoraba, pues ya se le había echo tarde, Sofi vestida con unos jeans un poco rotos un suéter de rayas rojas y azules, con una cola de caballo con su pelo lacio, se fue a casa de Valen una muchacha guapa, de pelo largo ondulado y güero, su mejor amiga desde siempre. Llego tarde y enlodada como siempre, pues había pasado por la tierra y como en la noche había llovida era ella un batidero, pero no le importaba se sentía bien estando así toda sucia de lodo. Valetina ya esperándola afuera de su casa con una bicicleta azul, tenia cara de impaciencia esa que siempre pone cuando algo no le parece, con los ojos fruncidos y la boca apretada. -Siempre tarde Sofa, que mala eres, vamos a llegar bien tarde con Jona venga vamos-, anduvieron alrededor de 15 minutos en medio de caminitos entre el bosque, estos eran sus pasadizos secretos para llegar mas rapido a cualquier lugar sin pasar por la carretera. Llegaron y tocaron en la casa vieja de Jona, tocaron y les atendió su padre diciendo -Jona sigue dormido no se si lo quieran despertar- -Por supuesto que si Señor Steves, muchas gracias- dijo Valen con impaciencia entrando fuertemente dentro de la casa mientras el Señor Steves y Sofi se burlaban por lo bajo de Valen. Subieron al cuarto y vieron a Jona como siempre lo veían durmiendo en su pequeña cama individual, con unos calzoncillos ridículos como de niño pequeño y la sabana le cubría tan solo las piernas. Sofia nunca lo había notado pero Jona era bien parecido, tenía un cuerpo delgado y un poco musculoso y ese pelo negro y tan abundante que Jona despreciaba, a Sofia le parecio esa mañana que lo hacia lucir muy varonil y guapo a pesar de estar todo despeinado. Valen brinco sobre la cama gritando -¡Jonaa! despierta bobo- y él asutado desperto con todo el sobresalto alegando que casi se le sale el corazón, que por que no tocaron la puerta mientras su cubria el cuerpo con la sabana un poco sonrojado. -Bueno dias bobo ¿como amaneciste?- le dijo sofia mientras Valen seguia brincando por el cuarto. -bien bien.. ahora podrían esperarme afuera por favor...-. Valentina y Sofía bajaron las escaleras y tomaron el chocolate que les daba el papa de Jona y se sentaron en la sala esperando. Bajo despues de 10 minutos y les hecho a ambas esa mirada asesina con esos enormes ojos grises, con cara de ¿por que me despertaron?, se voltearon a ver y con ojos de complicidad simplemente se rieron.
Vamos pues ya veran lo que les tengo que enseñar.